Los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV o bien VOC en inglés) son contaminantes del aire que cuando se mezclan con óxidos de nitrógeno, reaccionan para formar ozono. La presencia de concentraciones elevadas de ozono en el aire que respiramos puede ser muy peligrosa.

Los efectos sobre la salud de la exposición al ozono incluyen:

• Irritación de ojos y vías respiratorias; astenia, cefaleas.
• Alergias; disminución de la función pulmonar y lesiones al hígado, riñones, pulmones y sistema nervioso central.
• Los efectos sobre el medio ambiente incluyen la alteración de la función fotosintética de las plantas.

Los COV  Proceden de distintas fuentes naturales y artificiales, aunque su mayor producción se realiza en actividades industriales. Algunas de los principales productos que contienen COV son:

• Pinturas y barnices con base disolvente
• Solventes
• Pegamentos
• Aditivos para la industria
• Agentes desengrasantes y limpiantes

Pero pueden ser encontrados en artículos del hogar tan comunes como aerosoles y desodorantes.

En la Unión Europea los COV son fuertemente regulados y en algunos casos prohibidos. en comparación a México en donde la mayoría de las pinturas contienen un alto concentrado de estos componentes y la regulación es mínima. Para 2024 se busca reducir la emisión de estos componentes hasta en un 46%, mediante medidas que permitan mejorar la calidad del aire.

Entre estas medidas destaca, la regulación de productos de uso doméstico como aromatizantes, pinturas, recubrimientos, esmaltes y aerosoles.

Antes de adquirir cualquiera de estos productos es necesario:

• Informarnos sobre la cantidad del COV que tiene el producto.
• Adquirir productos con muy bajo contenido de COV o que no lo tengan.
• Inclinarnos por productos que ya integren una función específica para estos componentes.

Actualmente ya existen pinturas que purifican y depuran el aire, además de reducir la cantidad de sustancias perjudiciales para nuestra salud.